lunes, 27 de octubre de 2014

El Conciertazo XXXVII

Ayer por la mañana estaba yo tan tranquilo en mi cuarto, filosofando sobre cuestiones importantes sobre la vida humana como las que surgen cuando hace varios años los de Café Quijano, durante su gira veraniega, actuaban con las gabardinas puestas. ¿Cómo tenían que oler esas gabardinas? O, incluso, preguntas mucho más importantes y necesarias como: Ana Obregón. ¿Por qué y hasta cuando?

Estas cuestiones se vieron interrumpidas cuando entró en escena el sádico de mi vecino.

Y digo sádico porque creo que debía estar torturando a alguien. No le encuentro otra explicación a que, a las diez de la mañana, tuviera la música puesta para todo el barrio y para los municipios limítrofes.

Bueno, música. Podíamos definirlo como un conjunto de sonidos altamente repetitivos en los que las palabras más utilizadas eran 'papi'; 'mamasita' y 'dale'. Tenían pinta de canciones cuyo título albergaba muchos 'featuring'. 'Ya tu sabe'.

Entonces mis pensamientos se centraron en imaginar cómo Beethoven resucitaba de entre los muertos y, a pesar de su sordera, anunciaba su enrolamiento en las filas del Estado Islámico para arrasar con toda la civilización occidental hasta los cimientos y sembrarla de sal, con el único objetivo de acallar para siempre dicho conjunto de sonidos.

En un momento dado, atronó la canción 'Bailando', de Enrique Iglesias. Bueno, era la evolución lógica. Afortunadamente, fue la última canción que apuñaló los oídos del barrio. No sé si es que ya era demasiado para él o es que mi plegaria a todos los dioses del panteón, empezando por Marduk y acabando por Le Tissier, surtió efecto.

El caso es que, acabado el martirio, se me encendió la bombilla y me acordé de una canción-parodia del ínclito 'Bailando'.

Retomando mi espíritu analítico, y haciendo una comparación lo más objetiva y ponderada posible, concluí que debe ser bastante duro que un grupo de personas sin mucha formación hagan una parodia de un tema tuyo, tú que has podido tener acceso a lo mejor de lo mejor en educación musical se refiere, y dé la impresión que tanto la letra como el videoclip estén más currados que el tuyo. Y mira que la letra no es nada del otro mundo. Pero aún así.

Con ustedes, el dúo canario Rudy y Ruymán.



lunes, 13 de octubre de 2014