El verdadero maestro no es el que te da el libro, sino el que te enseña a leer

A lo largo de esa cosa que los científicos y estudiosos llaman vida, nos encontramos con un sinfín de personas. A algunas te dan ganas de atarlas de pies y manos, echarles por lo alto veinte tarros de miel y atarlas a la puerta de un hormiguero; pero hay otras que se ganan a pulso un lugar en nuestros corazones.

Algunas personas te dejan una huella indeleble en el cerebro, que no podrías borrar ni aunque quisieras. Exactamente, como la musiquita de los anuncios de Carefree, pero en este caso es para bien. Hablo de personas que te abren los ojos, que te abren la mente. Personas que exhalan sabiduría por todos los poros de su piel, que disfrutan transmitiendo sus vivencias para dotarte de una nueva perspectiva. Consejos intemporales en los que se pone de manifiesto que para todos la vida siempre es la misma, que pueden ayudarte a evitar errores que ellos mismos cometieron en el pasado. Personas como Diego 'El Profeta'.

A pesar de que en la primera impresión destaca su aspecto desaliñado, sus palabras destilan sabiduría y experiencia propia dignas de uno de los grandes pensadores más desconocidos e infravalorados de su tiempo. Sus palabras resuenan en el tímpano y se abren paso hacia el cerebro con la velocidad que sólamente pueden tener la verdad y la sabiduría. Os paso un vídeo que espero os haga reflexionar y ver la luz entre las tinieblas para que así os pueda cambiar la vida.